La adopción se produce cuando se separa a un niño o niña de su familia porque esta no puede proporcionarle un cuidado adecuado.
Sólo se adopta a un menor después de haber explorado todas las demás vías de apoyo, como por ejemplo ir a vivir con otros miembros de la familia. Es una decisión muy seria que tiene repercusiones de por vida para todas las personas implicadas.
Cuando las personas deciden que no pueden hacerse cargo de su hijo o hija, no es porque no lo quieran o no lo amen. Suele ser porque esa persona es física o emocionalmente incapaz de cuidar de su hijo o hija. Por ejemplo, la familia puede ser ya una familia numerosa, quedarse embarazada y decidir que no puede cuidar de un quinto hijo o hija. O el progenitor o progenitora puede tener problemas de salud mental o encontrarse demasiado mal para cuidar de un niño o niña.
Los niños o niñas casi siempre son acogidos antes de ser adoptados. A veces son trasladados varias veces antes de ir a vivir con su familia adoptiva y pasan por familias de acogida o por centros donde viven con otros niños y niñas cuyas familias no pueden hacerse cargo de su cuidado.
Hay familias de muchos tipos: pueden tener solo un padre o solo una madre, dos padres o dos madres o estar formadas por niños o niñas que viven con otros parientes, como abuelos y abuelas o tíos y tías. La adopción no es diferente, no somos más que otro tipo de familia. Así que, por favor, ten cuidado con hacer juicios sobre la familia de alguien porque no conoces el camino que ha recorrido o está recorriendo.
Acogimiento familiar significa que el niño o niña está bajo el sistema de protección y vive con una familia de acogida, que le proporciona el cuidado y el cariño que su familia no puede proporcionarle en ese momento.
La mayoría de estas familias son voluntarias pero también, en algunos casos, por ejemplo con niños y niñas que necesitan constantes cuidados especializados, las personas acogedoras son profesionales y reciben un salario por su trabajo de cuidar. También significa que los niños y niñas suelen seguir viendo a su familia de origen.
El acogimiento familiar suele ser una medida a corto plazo para ayudar a la familia a superar dificultades. Sin embargo, a veces los niños o niñas permanecen en acogida hasta que se hacen personas adultas, lo que se denomina acogimientos permanentes o de largo plazo.
En la adopción, el niño o niña pasa a ser un miembro más de su familia adoptiva y se cambian sus apellidos. Algunas veces también el nombre, pero casi siempre se mantiene el mismo que tenía.
Queremos que conozcas la diferencia entre adopción y acogida porque equivocarse puede ser molesto o doloroso y, en definitiva, queremos que nos entiendas.
Durante mucho tiempo, prácticamente todos los niños y niñas adoptados perdían el contacto con su familia de nacimiento después de la adopción. Esto se conoce como adopción cerrada.
Sin embargo, en las adopciones más modernas, a veces los niños y niñas tienen contacto con su familia de origen, mediante el intercambio de cartas y, a veces, cara a cara, porque las investigaciones nos dicen que esto es muy importante para que las personas comprendan su historia vital y su identidad.
Sin embargo, es muy diferente para cada niño o niña, y hay toda una variedad de razones por las que otras veces los niños y niñas no tienben contacto con sus familias de nacimiento. Nunca des por sentado que dos personas adoptadas han tenido la misma experiencia en su viaje de adopción, no hay dos experiencias iguales.
«¿Así que eres huérfano?». – Un huérfano o huérfana es alguien cuyos progenitores han muerto. Nuestros progenitores no han muerto, no podían cuidarnos. Muy diferente.
«Entonces, ¿sabes quién eres? – Esta es una pregunta muy personal y conmpleja, que puede resultar muy molesta.
«¿Cuándo ves a tu madre o a tu padre? – Otra pregunta muy personal que puede ser muy difícil de responder. Está bien tener curiosidad, pero ¿realmente necesitas saber esa información? ¿Puedes hacer una pregunta más general?
«¿Tus padres no son tus verdaderos padres? – ¿Qué significa «verdaderos padres»? Las familias adoptivas son tan reales como las biológicas, y viceversa.
Si quieres saber cómo funciona la adopción, haz preguntas generales y evita las preguntas personales.
Pregunta a la persona si se siente cómoda hablando de adopción antes de entrar en materia.
Cada persona tiene sentimientos distintos sobre su infancia, recuérdalo.
Recuerda también que lleva tiempo generar confianza y compartir cosas sobre nosotros mismos.
Si no queremos hablar de ello, no queremos hablar de ello, así que no presiones.
Está bien tener curiosidad, pero no está bien dar por sentado cómo son las cosas que no conoces.
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